La próstata es una glándula sexual del hombre que suele agrandarse (hiperplasia prostática benigna o HPB) cuando estos se acercan a la mediana edad y ello puede generar obstrucción a la uretra y producir diversos síntomas como: retardo en el proceso de orinar, flujo de orina débil, goteo de orina, urgencia miccional, necesidad de orinar de manera más frecuente; si estos trastornos al orinar no son controlados a tiempo pueden desencadenar enfermedades más severas entre ellas el cáncer de próstata (tumor prostático). Todos estos trastornos urinarios se presentan debido a que, a medida que la obstrucción aumenta, la vejiga realiza un mayor esfuerzo para vencer este bloqueo existente aumentando la presión al momento de la micción donde normalmente el total del volumen de orina generado no es completamente arrojado; estos restos de orina que no logran ser expulsados generan infecciones y cálculos vesicales.
El cáncer de próstata es una de las enfermedades más frecuente entre los hombres adultos, generalmente entre los mayores de 60 años y se ha convertido en la tercera causa de muerte por cáncer en el hombre tras del de pulmón y estómago.
Teniendo en cuenta esto es importante que se tomen las previsiones pertinentes y realizar los controles y tratamientos a tiempo, pero cuándo es el momento exacto para comenzar a realizarse estos controles.
De acuerdo a las investigaciones médicas y sus estadísticas un hombre debe comenzar a revisar su próstata a partir de los 50 años, por lo general; sin embargo, se deben tomar en cuenta otras informaciones que hacen que ciertos hombres sean más propensos a sufrir de cáncer de próstata en edades más tempranas. Por lo que:
También hay que tomar en cuenta otros factores que pueden hacer a los hombres más propensos a sufrir la enfermedad, como lo son: fumar activamente, la obesidad, la ingesta excesiva de carnes rojas, el alto consumo de grasas saturadas (grasas de origen animal como la carne, embutidos, o la leche y sus derivados, alimentos con aceite de palma, aceite de coco).
Adicionalmente, si usted se encontrase dentro de algún grupo de riesgo y además llegase a presentar hematuria (presencia de sangre en la orina) debería ir pensando en visitar al urólogo ya que es un signo clínico del cáncer de prostata.
Por ello realizar una revisión a tiempo evitará futuras complicaciones e inconvenientes, no olvidemos que el objetivo principal es PREVENIR y la mejor manera es realizando una visita al urólogo y que éste le genere su correspondiente ficha clínica y le realice las evaluaciones que según su caso le corresponda.
Estas evaluaciones podrían ser:
Con una simple visita al urólogo usted podrá evitar cualquier enfermedad prostática y en esa decisión el Dr. Bartolomé Lloret le ayudará en el mantenimiento de su buena salud.