La falta de orgasmo o anorgasmia es una situación en la que, tanto el hombre como la mujer, es incapaz de alcanzar del orgasmo durante una relación sexual. A pesar de tener una buena líbido y no padecer ningún problema de erección, se calcula que el 3% de los hombres tiene dificultades para llegar al orgasmo y conseguir las sensaciones placenteras suficientes para alcanzar el clímax.
Antes de profundizar más sobre la anorgasmia masculina, es importante distinguir entre eyaculación y orgasmo. Por lo general, ambas situaciones suelen producirse al mismo tiempo. No obstante, no siempre es así. Cuando un hombre padece de anorgasmia puede llegar a eyacular sin alcanzar el orgasmo, ni obtener placer. Existe otro tipo de situaciones, como la anaeyaculación, en las que el varón además de no llegar al orgasmo tampoco puede eyacular.
Tipos de anorgasmia
La anorgasmia o falta de orgasmo se puede clasificar en dos tipos:
Anorgasmia primaria: la padecen aquellas personas que nunca han sentido un orgasmo.
Anorgasmia secundaria: son personas que a pesar de haber tenido orgasmos, están atravesando por un momento en el que son incapaces de llegar al clímax durante una relación sexual.
En algunos casos la anorgasmia también se clasifica como: anorgasmia absoluta (cuando no se puede llegar al orgasmo por ninguna vía), anorgasmia relativa ( cuando el orgasmo se obtiene con alguna forma de excitación) o anorgasmia situacional ( en las que el orgasmo sólo se experimenta en situaciones concretas)
Causas de la anorgasmia
Las alteraciones psicológicas suelen ser la principal causa de la anorgasmia. Estados depresivos, de ansiedad o prejuicios sexuales derivados de una educación estricta y muy restrictiva en el ámbito sexual pueden derivar en una situación de anorgasmia.
Por otra parte, existen varias causas físicas responsables de la falta de orgasmo en el hombre como: daños en la espina dorsal, la esclerosis múltiple, operaciones en la zona de la pelvis que hayan afectado a los nervios de la zona genital u operaciones de próstata. La anorgasmia también puede venir derivada como consecuencia de trastornos hormonales, diabetes aguda, hipertensión, cáncer, osteoporosis y la toma de determinados medicamentos como antidepresivos o el consumo de sustancias como las drogas o alcohol.
Además, el aburrimiento y la falta de interés hacia la pareja suele ser otras de las causas de la anorgasmia ya que, para que se produzca el orgasmo, es necesario contar con una excitación previa.
¿Qué hacer ante un caso de anorgasmia?
Si llevas algún tiempo sin conseguir llegar al orgasmo en tus relaciones sexuales o sin poder eyacular es conveniente que visites cuanto antes al urólogo. El especialista será quien determine si tu problema está ocasionado por una alteración física o psicológica. Lo ideal es abordar el tema, ya que este tipo de problemas no suelen solucionarse por sí solo y acaban generando malestar en la pareja.
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