Una vez que somos diagnosticados con cáncer de próstata toca buscar soluciones y elegir el tratamiento que mejor se adapta a nuestro caso. En este post, nos centramos en la cirugía o prostactectomía radical, un método de tratamiento con el que se trata el cáncer de próstata localizado en la glándula prostática. Si el cáncer está en una etapa temprana, este tratamiento suele dar bastantes buenos resultados y consigue en muchos casos eliminar por completo el cáncer de próstata.
¿ Cómo es la cirugía del cáncer de próstata?
La cirugía o prostactectomía radical se utiliza en pacientes con un cáncer en fase inicial o localizado. Durante la intervención se extirpa la glándula prostática al completo con el fin de eliminar el tumor y evitar así que crezca fuera de la próstata. En algunas ocasiones también se acaba extirpando las vesículas seminales y los ganglios linfáticos.
En la intervención, que se realiza con anestesia general, la vejiga y la uretra se separan, con lo que el cirujano las une con puntos de sutura y coloca una sonda que el paciente tendrá que llevar unos días.
La hospitalización, si no hay complicaciones, suele tener una duración de una semana.
¿ Qué técnicas se utilizan en la cirugía del cáncer de próstata?
Retropúbica. Es la más usada. El cirujano realiza una incisión del ombligo al pubis para llegar a la próstata a través del abdomen.
Perineal. Con este tipo de cirugía es más fácil que el paciente tenga problemas de erección, por lo que se utiliza poco. Se realiza mediante una incisión entre el ano y el escroto.
Laparoscópica. Se hace mediante varias punciones en el abdomen a través de las cuales se colocan unos tubos con los que el cirujano opera mirando las imágenes en un monitor. No deja herida.
¿ Cuáles son los efectos secundarios de la cirugía para el cáncer de próstata?
A parte de los típicos efectos secundarios de cualquier intervención quirúrgica como: reacciones a la anestesia, infección de la zona o sangrado, la cirugía que se utiliza para tratar el cáncer de próstata puede traer consigo las siguientes complicaciones:
Incontinencia urinaria debido a la falta de control de la vejiga.
Disfunción eréctil. Aunque el cirujano intentará preservar los nervios, si el cáncer ha crecido en su dirección no quedará más remedio que quitarlos.
Orgasmo seco. La prostatectomía radical corta los conductos deferentes, por lo tanto, aunque el cuerpo siga produciendo esperma, éste no será expulsado mediante la eyaculación.
Hinchazón y dolor en la zona genital. También se conoce como lifedema. Viene producido por la acumulación de líquido en piernas y zona genital, que se produce después de retirar los ganglios linfáticos.
Reducción en la longitud del pene. Generalmente producida por el acortamiento de la uretra.
Hernia inguinal.
Además de la cirugía, el paciente afectado por cáncer de próstata tiene hoy en día a su disposición otro tipo de tratamientos como la radioterapia, braquiterapia o la crioterapia, técnica de la que ya hemos hablado en nuestro blog. En cualquier caso corresponderá al especialista y paciente decidir qué tratamiento es el más adecuado para cada caso. La cirugía suele realizarse en hombres con una esperanza de vida de al menos 10 años.
En el Centro de Salud para el Hombre del Hospital Vithas Medimar Internacional pensamos que el mejor tratamiento con el cáncer de próstata es la prevención. Por eso te recomendamos que como mínimo, una vez al año visites a tu urólogo y que a la menor duda nos consultes. Llámanos y te atenderemos con mucho gusto.