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La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es un agrandamiento benigno de la glándula prostática que los hombres experimentan con la edad. Es el tumor benigno más frecuente entre los hombres españoles. Cada año se diagnostican más de 6 millones de casos en España y aunque no tiene nada que ver con el cáncer, sus síntomas pueden ser los mismos.
El crecimiento de la próstata es inherente al envejecimiento y al paso de los años. Por lo general, la próstata experimenta su mayor desarrollo durante la pubertad, cuando la glándula dobla su tamaño. Posteriormente, la próstata sigue creciendo a lo largo de toda la vida del varón pero, no es hasta pasados los 50 años, cuando generalmente puede empezar a dar problemas.
El aumento del tamaño de la próstata provoca una compresión de la uretra. Esta circunstancia dificulta la salida de la orina y puede llegar a causar una obstrucción total del sistema urinario, acumulación de orina en el riñón o insuficiencia renal.
Pero además de esto, la orina que queda almacenada en la vejiga puede producir irritación e infecciones en las vías urinarias. También puede ser la causante de la aparición de cálculos urinarios en el revestimiento de la vejiga debido a la acumulación de productos y sustancias de desecho. Asimismo, también puede derivar en un estiramiento de la pared de la vejiga.
Aunque no todos los hombres con un crecimiento de la próstata presentan síntomas, podemos decir que el crecimiento benigno de la próstata se manifiesta con problemas relacionados con el bienestar urinario.
Para conocer por qué se producen estas molestias es importante saber que la próstata es una glándula del tamaño de una nuez. Se encuentra situada en la base de la vejiga y rodea la parte inicial de la uretra, que es el conducto por el que se expulsa al exterior la orina que se almacena en la vejiga.
El hecho de que la próstata esté tan relacionada con la uretra, hace que cualquier tipo de alteración que afecte a su tamaño, pueda comprimirla y provoque un impedimento en el paso de la orina hacia el exterior. Los síntomas más frecuentes son:
Como ya hemos señalado al inicio, muchos de los síntomas que aparecen con la hiperplasia benigna de próstata son los mismos que se manifiestan cuando existe un cáncer de próstata.
Ante cualquier malestar de nuestro sistema urinario es importante consultar con el urólogo, ya que el profesional médico realizará las pruebas pertinentes para determinar si nuestros síntomas están causados por un agrandamiento benigno de la próstata o por cualquier otra causa.
¿Qué tipos de tratamiento existen para la hiperplasia benigna de próstata?
Las personas con problemas causados por el agrandamiento de próstata (HBP) cuentan con diferentes tipos de tratamiento que serán prescritos por el urólogo. A día de hoy existen medicamentos que relajan los músculos de la próstata y cuello de la vejiga y reducen el tamaño de la próstata. Dependiendo del caso, también se puede optar por la cirugía o tratamientos menos invasivos y con menos efectos secundarios como la fotovaporización o la enucleación prostática con láser verde.
Si crees que estás experimentando algún problema con tu bienestar urinario ponte en contacto con el Centro de Salud para el Hombre del Hospital Internacional Medimar de Alicante. Un equipo de profesionales especializados en salud urológica estudiará tu caso y te propondrá el mejor remedio para ti.
