Como sabemos todos la época de verano es sinónimo de vacaciones y es el momento en que la mayoría de las personas disfrutan de la playa y de la piscina, pero mucho cuidado con las infecciones urinarias porque es el ambiente propicio para la proliferación de bacterias que son las principales causantes de las infecciones del tracto urinario por temas humedad, calor, sudor, los baños, etc.
Las infecciones urinarias son un tipo de enfermedades que se dan tanto en hombres como en mujeres. Es una infección muy molesta que necesita un tratamiento inmediato en el momento que empiezan a aparecer sus síntomas ya que si lo dejamos pasar, esta infección puede tener consecuencias graves. Tratándose de uno de los problemas sanitarios más comunes, es necesario conocer sus causas, tratamiento y posibles formas de prevenirlo.
Podríamos decir que la principal causa de las infecciones urinarias se debe a aquellas bacterias que viven en el intestino grueso. En los hombres, más concretamente, la glándula de la próstata produce unas secreciones que retardan el crecimiento de estas bacterias, aunque a pesar de ello estos tienen riesgo de padecer infecciones de la misma manera.
En el momento que las bacterias suben a los riñones estas infecciones se complican, ya que a pesar de ser menos frecuente, es mucho más grave que una infección normal como puede ser la cistitis, por lo que necesita un tratamiento más severo y controlado.
Algunos de los síntomas que se manifiestan y los cuales son una alerta de que debemos acudir al médico de inmediato serían los siguientes:
√ Necesidad de ir a orinar constantemente a pesar de no tener ganas.
√ Orina con fuerte olor, color amarillento intenso e incluso, algunas veces, sangrado.
√ Temperatura elevada y escalofríos.
√ Sensación de ardor al orinar.
¿Cómo se puede saber si se trata de una infección de orina o no?
Mediante un buen diagnóstico se podrá saber de qué se trata. Este se basa en la historia clínica y en una exploración, por parte del doctor, al paciente. Algunos de los estudios radiológicos que se llevan a cabo son la radiografía del abdomen y una ecografía, además de los análisis corrientes y un urocultivo para la recogida correcta de la orina.
¿Cuál es el tratamiento más adecuado?
En función de la gravedad de la infección, se procederá a recetar un tratamiento u otro. Si la infección es una cistitis común, el tratamiento será la administración de antibióticos durante dos o tres días. Por otro lado, si la infección es más grave y ha llegado a los riñones, habrá posibilidad de ser ingresado durante unos días para llevar un control exhaustivo del paciente y poder darle la medicación adecuada hasta que la infección desaparezca de los riñones y la próstata.
Las infecciones urinarias no desaparecen de un día para otro. Es un proceso que tarde unos días y que requiere de una recuperación adecuada si queremos que desaparezcan las molestias por completo. En el caso de volver a aparecer después de la recuperación, será conveniente realizar unas pruebas para diagnosticar la aparición de enfermedades que provocan esta infección.
¿Cómo afecta este problema a los niños?
Este tipo de infecciones son muy frecuentes en la población infantil. Esto puede deberse a diversos problemas funcionales. En algunos casos las infecciones pasan inadvertidas ya que los niños no conocen cuáles son los síntomas.
Estos se suelen ver manifestados en comportamientos como dejar de comer, temperatura elevada, o irritabilidad.
Es imprescindible frenar este tipo de infecciones cuánto antes, ya que esto puede derivar e problemas más graves que pueden afectar a la salud de los más pequeños en un futuro.
¿Cuáles son las causas principales?
Algunos de los factores que pueden desencadenar una infección urinaria son:
√ Cualquier alteración del aparato urinario, cómo por ejemplo una piedra.
√ Presencia de un catéter o sonda.
√ En ocasiones, la actividad sexual puede propiciar la introducción de bacterias en la vejiga, aumentando el riesgo de tener una cistitis.
√ Alteraciones en la vejiga.
√ Reflujo vesicoureteral.
√ Factores genéticos. También la diabetes, por ejemplo, o las personas mayores y con defensas más bajas.
¿Cómo se puede prevenir este tipo de infecciones urinarias?
Existen algunas acciones muy sencillas de realizar, pero se deben tener muy en cuenta ya que si se realizan de la manera correcta podremos ahorrarnos muchos problemas de salud. Algunas de ellas son:
√ Si tiene ganas de orinar, no posponga la ida al baño por largo tiempo.
√ Es importante vaciar por completo la vejiga.
√ Beber mucha agua a lo largo del día limpia nuestro organismo, en especial el sistema urinario.
√ Ir al baño tras realizar el acto sexual.
Ante cualquiera duda o síntoma, lo mejor es acudir a un especialista que le ponga al tanto de un tratamiento adecuado.
En el caso de que no se aprecie ningún tipo de infección a través de un análisis de orina, acuda a su urólogo para realizar otros diagnósticos y las pruebas correspondientes.
Cómo ya os hemos comentado en otras ocasiones, el tratar una enfermedad en el momento de su aparición es importante para evitar problemas a largo plazo.