La visita al urólogo es una de las asignaturas pendientes de los hombres españoles. La gran mayoría sólo acude a la consulta del urólogo cuando lleva ya casi un año con algún tipo de sintomatología. Dependiendo de la patología puede ser peligroso. Las revisiones urológicas son imprescindibles para diagnosticar algunos trastornos como:

• la hiperplasia benigna de próstata
• el cáncer de próstata

Lo ideal es que el hombre afronte las visitas a la consulta del urólogo como una rutina más de salud. Al igual que nos hacemos una analítica anual de sangre o revisamos periódicamente nuestra vista, la visita al urólogo nos puede librar de problemas de salud que, no sólo restan calidad a nuestra vida, sino que pueden acabar en temas tan serios como el cáncer.

¿Por qué la visita al urólogo sigue siendo una asignatura pendiente?

Hay tres razones por las que el hombre sigue sin acudir a la visita del urólogo:

• Desinterés: Los  varones piensan que los problemas que van experimentando en su cuerpo son fruto del avance de la edad y no les dan mayor importancia.
• Desconocimiento: Hay muchos hombres que no saben que a partir de cierta edad la próstata empieza a aumentar su tamaño.
• Miedo: Todavía a día de hoy la visita a la consulta del urólogo se asocia con el temido tacto rectal.  Ante esto tenemos que aclarar que, el tacto rectal es una prueba muy útil para el diagnóstico del cáncer de próstata.  Es rápida y apenas molesta. No obstante si el paciente no quiere, no hay obligación de realizársela. 

¿Cuándo debo empezar a acudir al urólogo?

A partir de los 40 años deberíamos empezar con las revisiones urológicas ya que es entonces cuando se experimenta un nuevo agradamiento de la próstata.  Los hombres con antecedentes familiares con cáncer de próstata deben prestar especial atención a las revisiones periódicas. Con la primera visita al urólogo, el profesional médico puede hacer una estimación del riesgo de padecer cáncer en un futuro y establecer un régimen de visitas posterior.

A parte de la edad también debemos acudir al urólogo cuando tenemos síntomas como: presencia de sangre en la orina, cambios en la micción, dificultad con las erecciones, incontinencia urinaria, infecciones recurrentes y ante la aparición de algún bulto en los testículos.

¿Cómo es la primera visita al urólogo?

En la primera visita al urólogo, el médico elaborará un historial médico para lo que se nos preguntarán los datos personales, enfermedades padecidas, nuestros hábitos, alergias y el consumo de medicamentos.

Por otra parte, llevará a cabo una revisión de nuestra salud urológica con una exploración genital y abdominal. También puede ordenar la realización de exámenes complementarios como un análisis de PSA, que puede detectar el cáncer de próstata y una ecografía urológica para comprobar el estado de riñones, vejiga, glándulas suprarrenales y próstata.

La visita al urólogo se tiene que afrontar como una oportunidad para mejorar nuestra calidad de vida. Así que si crees que padeces algún tipo de problemas, hay que dejar de lado la vergüenza y los complejos y explicárselo al médico con total confianza.

¿Qué tipo de problemas puedo solucionar con la visita al urólogo?

El urólogo es un profesional médico que puede ayudarte a solucionar patologías que afectan al aparato reproductor masculino, sistema urinario y glándulas suprarrenales. Los problemas más frecuentes en la consulta de urólogo son: eyaculación precoz, disfunción eréctil, varicocele, cálculos renales, obstrucción de las vías urinarias, infecciones y tumores.