Se inyectan sustancias (a través de una aguja) dentro de los tejidos que rodean la uretra. El implante agrega volumen y ayuda a que la uretra se mantenga cerrada. Este tratamiento reduce la incontinencia de esfuerzo. Se han usado el colágeno (un tejido fibroso natural de las vacas) y la grasa del cuerpo de la persona. Este procedimiento dura unos 30 minutos y puede ser llevado a cabo en el consultorio del médico usando anestesia local.
El índice de éxito de los implantes varía. Las inyecciones deben repetirse luego de algún tiempo porque el cuerpo se deshace lentamente de las sustancias. Antes de recibir una inyección de colágeno, debe hacerse un examen de piel para asegurarse de que no es alérgica a esta sustancia.